Si tenemos empleados que solo trabajan en nuestra empresa por el dinero, tenemos entonces mercenarios y no soldados que sea capaces de morir por nuestra causa”, afirma Arturo Villegas, conferencista y escritor mexicano que estará en el 13° Congreso Andino de Contact Centers y CRM, que se realizará del 19 al 21 de abril en Bogotá, y cuyo tema central girará alrededor de la felicidad en los ambientes laborales.
Y es que la felicidad, por etérea que parezca, se ha convertido en un elemento que afecta directamente la productividad de las empresas, como lo demuestra el meta análisis que Sonja Lyubomirsky, Laura King y Ed Diener realizaron entre más de 225 estudios de diferentes partes del mundo.
Este tema también ha sido destacado en libros como el ‘Positive Intelligence’, de Shirzad Chamine; ‘Make More Money by Making Your Employees Happy’, de Noelle C. Nelson, o ‘Cómo ser feliz en el trabajo’, de Arturo Villegas, entre otros, que no solo comparten un tema común, sino que han sido estrellas de ventas en Amazon, la librería virtual más importante del planeta.
Los hallazgos también han sido contundentes, según cifras del Centro de Competitividad de la Universidad de Warwick, los estados de ‘felicidad’ pueden influir en incrementos de la productividad de los empleados de hasta el 20 por ciento. Villegas, por su parte, llega más allá y agrega que los empleados inconformes con su trabajo pueden rendir hasta un 80 por ciento menos que sus semejantes.
Hasta un 80 % menos pueden rendir los empleados inconformes con su trabajo.
Otra muestra directa de la relación entre el bienestar laboral y la productividad la indican los niveles de ausentismo que, según el iOpener Institute for People and Performance, son hasta diez veces menores en empleados felices.
Pero hablar sobre la felicidad y alcanzarla son dos cosas totalmente diferentes, la felicidad es un blanco móvil, ya que una vez alcanzado un objetivo los individuos suelen buscan otras metas, entonces la pregunta es ¿cómo generar ese estado de bienestar en la fuerza laboral? Ante esta inquietud Villegas responde que es posible lograrlo con una estrategia que va más allá de elementos tradicionales, pues el managment debe evolucionar con el tiempo. “Algunos grandes ejemplos de este nuevo tipo de gerencia lo dan compañías como Disney o Google que buscan inculcar los valores de su empresa de una forma emotiva, al punto que el departamento de recursos humanos de la primera de ellas suele afirmar que ellos “no meten a los empleados en el mundo de Walt Disney, ellos meten a Disney en el corazón de sus empleados”.
MÁS ALLÁ DEL EMPLEADO DEL MES
Los individuos se mueven en cuatro dimensiones: física, emocional, espiritual y mental, según afirma Arturo Villegas. Es importante buscar el desarrollo de todas porque, aunque “la felicidad como tal es una decisión personal”, también es posible generar políticas que estimulen a los empleados. Jornadas de capacitación, deportivas, de inclusión con las familias y de desarrollo artístico, son apenas una muestra del arsenal de herramientas que buscan mejorar la comunicación y el ambiente laboral.
La inversión en dichos programas no tiene que ser cuantiosa y es posible aliarse con planes gubernamentales que apunten a estimular el bienestar físico y emocional de los empleados.
Dentro de este marco es necesario desarrollar, además, estrategias para incentivar la fuerza laboral más allá de un reconocimiento rutinario. Una solución, propuesta por Villegas, es invitar a la alta gerencia a desayunar con el empleado destacado del mes y preguntarle por las inquietudes, problemas y secretos que tienen para lograr destacarse en el ambiente laboral.
Por último, Villegas agrega un mantra que refleja esta filosofía y es “cuida a tu trabajador y tu trabajador cuidará de tu empresa, después de todo, un trabajador feliz es un trabajador productivo”.